Las sillas de ruedas eléctricas han experimentado una evolución sin precedentes en los últimos años. Se han convertido en el medio de transporte preferido para personas que no pueden andar, o bien que pueden caminar poco, o les resulta complicado seguir a sus acompañantes. Gracias a ellas las personas que lo desean pueden continuar de manera autónoma, sin perderse nada que no se quieran.
Para Ortopedia25 la importancia de una silla de ruedas va más allá de lo funcional, ya que incluye aspectos sociales y emocionales que son tan importantes o más que cuatro ruedas electrificadas.
Las sillas de ruedas eléctricas han evolucionado mucho estos últimos años, tanto en ergonomía como diseño, potencia o peso, y esa es la clave para que
Además, a medida que siga mejorando, las opciones y características de estos productos continuarán aumentando exponencialmente.
En esta guía de características técnicas y tipologías queremos ayudarte a elegir la silla que más te convenga, dependiendo de tus intereses y forma de vida.
En Ortopedia 25 te aconsejamos que observes estos aspectos antes de decidirte a adquirir tu silla.
1. Según el tipo de terreno por el que suelas moverte la silla deberá tener unas características u otras, tanto con relación a las ruedas, como al sistema de suspensión o la potencia que necesite el motor.
Respecto a las ruedas, las hay de dos tipos, macizas o neumáticas. Las primeras son más duras y resistentes, pero también son más rígidas con lo que no pueden absorber las oscilaciones o vibraciones del terreno. Además, con el desgaste pueden deformarse.
Las ruedas neumáticas absorben mejor los impactos, tienen mayor adherencia al suelo y son más confortables, sobre todo si se utilizan para recorrer grandes distancias o hay que superar zonas irregulares como bordillos o badenes.
Nuestra recomendación en general es elegir siempre la rueda maciza porque da muchos menos problemas al usuario. El inconveniente del confort se puede suplir con mejores amortiguaciones. Son ruedas que se desgastan más y que, por lo tanto, hay que revisar con mayor frecuencia.
2. La amortiguación o suspensión es el sistema que tiene la silla para proteger a la persona de los impactos, vibraciones o rebotes que hay en su camino. Hay sillas con amortiguación delantera, trasera o ambas y son muy recomendables siempre, aunque especialmente para personas con dolores en la cadera o en la espalda.
3. La potencia de una silla eléctrica depende de los watios que tiene el motor. A más potencia, más sencillo será transitar por inclinaciones o cuestas, será imprescindible estudiar las pendientes ya que con más de un 10% de inclinación es importante conocer todas las opciones.
En Ortopedia25 aconsejamos seguir la guía de fabricación ya que es el documento en el que todos los fabricantes indican el peso máximo que recomiendan su producto. También hay que tener en cuenta el entorno por el que se moverá la silla.
En general hay que ajustar el peso y la altura de la persona con la superficie por la que suele circular, desniveles incluidos, y la potencia que necesita, porque personas delgadas también pueden necesitar más watios.
4. Según la distancia que se tenga que recorrer se puede optar por una silla con más autonomía que otra. Los amperios/hora indican la capacidad de carga de la batería, de tal manera que, a más amperios, más tiempo de autonomía tiene. La autonomía suele depender no sólo de lo que indique el fabricante, sino también del peso, los desniveles, las características del terreno… El tiempo que haga que tengamos la silla, son factores imprescindibles para calcular el tiempo que nos durará la batería.
Hay sillas eléctricas que cuentan con baterías de repuesto. Suelen ser las ultraligeras o las plegables, que pesan un poco más pero que son sumamente útiles para viajar de un lado a otro.
5. Dependiendo de quién vaya a conducir la silla de ruedas eléctrica se puede incorporar un segundo mando o utilizar el mismo, pero cambiándolo de posición. Es importante valorar el estado de la persona que va a utilizar la silla y por cuánto tiempo podrá hacerlo por sí sola, o si necesitará ayuda en breve.
Existen dos tipos de sillas eléctricas en el mercado, cada una de ellas con sus características técnicas específicas, según las necesidades del usuario.
- La silla de ruedas eléctrica estándar clásica no plegable con baterías debajo es la que da más opciones de configuración, y una gran aliada de toda la vida para la independencia de quien la necesita. Puedes configurar los motores eléctricos, para que hagan diferentes funciones como elevación del paciente, reclinación, elevación de reposapiés. Son, por tanto, las más configurables, aunque tienen como inconveniente que se necesita tener un coche adaptado para hacer distancias, suelen ser más robustas por lo que necesitan mantenimiento pero suelen ocupar mucho más, problemas en ascensores y demás espacios pequeños.
Disponen de baterías y un mando tipo joystick para poder moverse de manera suave y sin esfuerzo en cualquier dirección. Suelen ser baterías grandes con gran autonomía y confort.
Es una silla que recomendamos mucho para uso interior y exterior en pacientes que requieran configurar una silla de ruedas eléctrica por necesidades corporales o temas de confort
- La silla de ruedas eléctrica plegable es la mejor para personas que se desplazan muy a menudo. Es un tipo de silla muy cómoda, ya que se puede plegar rápidamente para llevar en un vehículo. Es ligera, duradera y tiene muy buena maniobrabilidad para moverse sobre una gran cantidad de superficies.
Son sillas de ruedas perfectas para Mallorca, tanto para los residentes como para los turistas, ya que, en la isla, el uso del coche es casi obligatorio para trasladarse desde el aeropuerto, visitar la costa, hacer turismo o salir a comer un domingo, por ejemplo.
Sus baterías suelen ser más pequeñas, por lo que la autonomía no será tan alta, pero en cambio será mucho más ligera, nos da todas las opciones para estar donde queramos estar. No es configurable en complementos, si en cambio suele ser la primera silla para personas que apenas las necesitan por lo que prima el transporte antes que la adaptación al cuerpo. En cualquier caso, la evolución en apariencia es que es una silla muy robusta y,sobre todo, son muy cómodas.